martes, 10 de enero de 2012

Concluyendo una etapa...


Fue  un acierto  haber incluído teatro  como un aspecto curricular , ya que las dos  promociones  anteriores  y la mía  efectuamos seis puestas en escena de distintas obras: El Médico a Palos y Las preciosas Ridículas” ambas de Moliere; La Zapatera Prodigiosa de Federico García Lorca; “Puebla de las Mujeres” deÁlvarez Quintero; ElPedido de Mano de Anton Chéjov y “Cascabel Cascabelito” de Armando Moock Bousquet
También la promoción siguiente  (1964) presentó a fin de curso una obra, de Alejandro Casona, titulada Prohibido Suicidarse en Primavera”, en la que recuerdo participaron Miriam Cofré, Susana Icare, Rubén Obeid.
Asistí a la función que estuvo muy bien lograda, con interesantes actuaciones y montada a la manera que se venía haciendo en el marco de las actividades de Instituto Secundario San Martín de los Andes. Con una escenografía, vestuario y aditamentos técnicos de luz y sonido con que se contaba en la localidad, con la generosa colaboración y asesoramiento del Conjunto Vocacional Huella. 
Mi homenaje a este conjunto que no solamente estuvo en actividad  desde 1957 ofreciendo, a  quienes   quisieran,  formar parte la posibilidad de hacer teatro,  sino también , fundamentalmente, ensayando obras y ofreciéndolas al público sanmartinense. Para la gente de nuestra ciudad, el estreno de una obra por el Conjunto Huella, constituía un importante evento social, donde los concurrentes asistían luciendo su mejor  indumentaria : traje la mayoría de los hombres y acaso el mejor vestido las damas, peinados  de peluquería y demás. Era tener un espectáculo para el esparcimiento y motivo de comentarios por algunos días. Era una actividad notable en aquel San Martín de los cincuenta y los sesenta.
También, ya finalizando la etapa escolar de estos recuerdos del teatro, destaco el acierto de la dirección y los profesores del ISSMA al motivar a sus alumnos en esta manifestación artística cuyos valores pasan por diversos aspectos formativos, de aprendizaje, de interrelaciones y  sin duda constituyeron una muy valiosa experiencia  para el futuro inmediato de  los que estábamos terminando esa inolvidable, inigualable y decisiva instancia de finalizar nuestro tiempo del secundario y encarar la vida ya fuese estudiando una carrera universitaria o incorporándonos al ámbito del trabajo.
En cuanto a los profesores personalizaré el reconocimiento en la Sra. Efilda margarita Stuart de Boyle , la rectora del ISSMA y en quienes fueran mis profes de literatura: la Sra. De Lombardo y el Sr. Luis Fernández (Cliche ).

De la gente de Huella el reconocimiento debe ir a los siguientes nombres: José Carlos Bondi, Eleuterio González, Hugo Burgos, Alfredo Pargade, Edmundo Demateo, Elba C. de Leotta,  Quico Leotta, Willy Hassler, Elba de Hassler,
Beba de Dicembre.
Esta etapa de los recuerdos cierra para mi con la finalización del año 1963 en que concluí mes estudios secundarios.-
La imagen que ilustra esta entrada, muestra las máscaras de la tragedia y de la comedia que me fueran obsequiadas por el matrimonio de Almira Surla y Janko Bradac, inolvidables AMIGOS,  a quienes conocí en el año del inicio de mi secundario, en 1959, se prolongó más allá de haber egresado.

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