CONJUNTO VOCACIONAL HUELLA

HUELLA  LAS ESCENOGRAFÍAS Y EL RECUERDO DE BONDI

Huella se caracterizó por darle gran importancia a las escenografías de las obras que montaba. Consecuencia: un gran esfuerzo puesto en ese aspecto y logros muy meritorios, mérito que tiene más valor  si se piensa en los escasos recursos de esos años. Es difícil hoy conseguir recursos para escenografías y efectos, es difícil construir  y montar  escenografías, en gran medida porque no se cuenta a esta altura con una sala que desde su origen esté  provista de un adecuado escenario;  cuánto más en aquel tiempo.

Pero yendo al tema del título y su relación con el nombre de un integrante que fue fundamental en el primer conjunto teatral de San Martín de los Andes, me refiero al señor José Carlos Bondi, a quien afectuosamente lo llamábamos por el apellido, tal vez porque es más fácil decir Bondí que decir José Carlos; nunca escuché a nadie del grupo que lo llamara sino por su apellido.
Bondi era maestro de escuela primaria, oriundo de Cañada de Gómez, en la provincia de Santa Fe. Una persona con muy sólida preparación, además de su gusto por el teatro era afecto a la lectura, la pintura, la fotografía; también la jardinería: recuerdo haber visto fotografías o diapositivas, que me mostrara alguna vez, del hermoso jardín que construyó en el paraje Hua Hum, en la casa de la escuela nacional Nº 53 donde fue director y maestro durante los once años que vivió y trabajó en nuestra provincia.
Es lógico que siendo sensible a la  estética por sus aficiones, sabiendo de pinturas, colores, luces, sombras, formas y proporciones, además de actuar y a veces dirigir las puestas, tomara a su cargo el diseño y la concreción de las escenografías. Claro que algunos de los demás integrantes lo ayudábamos, pero bajo su guía y dirección.

Me tocó colaborar con mi colega en la escenografía de "La zorra y las Uvas". Muchas horas y varios días nos insumió pintar los bastidores simulando piedras, columnas y también elementos de utilería. Trabajábamos en el local de panadería , por ese tiempo cerrada,  de mi abuelo Juan Antonio, en la calle Villegas, que tenía un salón amplio, la cuadra, que venía muy bien y también hicimos allí muchos de los ensayos. Allí tuvimos oportunidad de conversar bastante y de los más diversos temas: seguramente de la profesión, él era bastante mayor que yo y con varios años de docencia, campo en que yo me estaba iniciando. Acaso haya sido en esas horas de trabajo compartido que me relató acerca de su vida en el paraje Hua Hum, de las personas y de unos misteriosos ruidos en la casa que habitaba, que se producían una vez al año, y que él atribuía a algún alma o presencia, lo que seguramente tomaba asidero en que, cerca de la escuela, había un antiguo cementerio.

Años después, el derrotero de mi función docente me llevaría a trabajar cuatro años en la misma escuela de Hua Hum y acaso recordando los relatos de mi antiguo compañero de teatro, pasé una noche el mayor susto que recuerdo…Pero eso sería otra historia y debo volver al tema de las escenografías y al cariñosamente recordado Maestro Bondi. Diré que por razones de salud consiguió traslado a la Capital Federal, allí fue secretario de una escuela y  posteriormente  supimos la ingrata noticia de su fallecimiento por una afección cardíaca.

Creo que todos los de la época teatristas y vecinos de un San Martín  donde todos nos conocíamos, guardamos un grato recuerdo de este maestro, de cordial y educado trato, sólida cultura y espíritu de trabajo;  que llevó su vocación docente más allá del aula, mediante  ladifusión de las artes, principalmente del teatro.

Desde aquí mi homenaje al que,  estoy seguro, se suman los integrantes de Huella y todas las personas que  lo conocieron.-

      Escena de  "La Zorra y las Uvas" de G. Figueiredo

     Izq. C.Buganem Der. José C. Bondi /detrás Silvia Capiet.

( En la próxima entrada consignaré algunos recuerdo con mayor detalle de las escenografías de Los ärboles Mueren de Pie y de La Zorra y las Uvas.)